La “historia” del pálido punto azul de Carl Sagan suele recordarnos lo pequeños e insignificantes que son nuestros problemas en comparación con la escala del universo. La tierra fotografiada por la Voyager 1 desde miles de millones de kilómetros muestra una imagen de un lugar tranquilo y frágil. La analogía es un marco que nos ayuda a pensar más allá de nuestros problemas y aplacar nuestras diferencias.
Lo mismo se aplica cuando reflexionamos sobre el significado y el propósito relacionados con la experiencia humana. No tener una experiencia compartida en torno a esos temas no lo hace menos valioso. Cuando la religión fue universalmente adoptada, nos sentimos espiritualmente interconectados, con ramificaciones sociológicas.
El nihilismo y la falta de propósito suelen canalizarse con una actitud pesimista bajo una mirada que nada importa. El problema con este punto de vista es la realidad de la afirmación, que suele sentirse más como una actitud performativa que como un punto de vista real. En otras palabras, ¿cómo puede una persona operar sin que le importe nada?
La acción performativa se basa en una interpretación individual de la sociedad en la que cada individuo crea un conjunto de preferencias. La deducción y la interpolación significan que la sociedad está construida por un conjunto de individuos que se preocupan por cosas específicas y, a veces, encontramos un lugar común. Sin embargo, en muchos otros temas no encontramos un lugar común, por lo tanto, el nihilista performativo se presenta con una explicación pesimista. Los temas pueden variar ampliamente, pero un buen ejemplo es el cambio climático. El nihilista performativo describirá cuán cerca del desastre estamos porque el cambio climático no es una preferencia a nivel individual, por lo tanto, carecemos de la conciencia global para realizar el cambio necesario para trascender una sociedad basada en el petróleo. El problema con esta línea de pensamiento es que presenta una derrota antes de comprometerse a analizar el tema. El marco no permite pensar críticamente sobre el tema en específico y ofrece menos formas de pensar en una solución potencial. Psicológicamente, el sujeto intenta liberarse de la carga mental que una profunda crisis conlleva y la reemplaza con una filosofía pesimista para que la preocupación desaparezca. El sujeto ha resignificado la existencia para hacerla más soportable, pero bajo algunas acrobacias mentales importantes.
Con este contraargumento, no pretendo minimizar la profundidad de ninguna crisis ni caer en un pensamiento mágico argumentando que la tecnología resolvería todo. El punto principal es evitar una perspectiva nihilista predeterminada que aniquile cualquier pensamiento crítico y, con ello, cualquier progreso futuro para superar cualquier crisis desafiante.
Imaginemos a dos amigos discutiendo sobre el vegetarianismo y veganismo. Uno le pregunta al otro, ¿Y si las plantas sienten, que comerían los vegetarianos y veganos?. La pregunta infiere que una de las premisas principales de ambas dietas es evitar el sufrimiento animal, pero si extendemos el concepto a todo lo vivo también sugiere la pregunta: ¿Qué realmente podría comer un vegetariano y vegano?
La retórica alrededor de este argumento se repite normalmente siendo una simplificación de los fundamentos morales que adoptamos y rigen distintas sociedades.
La pregunta normalmente se plantea como si fuese una gran revelación y un gesto infalible para desenmascarar un cierto cinismo e hipocresía que vegetarianos y veganos poseen, al igual que quedar el descubierto.
La respuesta a todo esto no es para nada sencilla, dado que los mismos conceptos de moralidad se aplican a otras dietas sin ni siquiera pensar en ellas. Por ejemplo, dado que el sentir animal no es prioridad en dietas tradicionalmente carnívoras ¿Por qué solo comer solo chanchos, gallinas y vacas? ¿Por qué no extenderlo a perros, gatos y otros animales domésticos? En China casi no existen límites de que animales comer, de hecho existe un dicho que al parecer fue repetido por el príncipe Philip que dice:
Si vuela, nada o tiene cuatro patas y no es una silla o mesa los chinos se lo comen”.
Por lo tanto, ¿Qué hace estremecer a un occidental cuando le mencionan comer animales tan exóticos como serpientes o murciélagos en una sopa?
Es decir, existe una moralidad tácita hacia ciertas especies, que se divide en dos áreas. Uno potencialmente relacionado al disgusto más que el respeto a esas especies que quedan fuera de la cadena alimenticia, nadie detiene a un occidental a comer serpiente pero dudo que alguien de verdad quiera hacerlo, como lo podría hacer en un mercado de comida en Hong Kong. Segundo, los animales domésticos parecen albergar una clasificación distinta, dado que son capaces de apelar directamente a la emocionalidad y vínculo con los humanos, llegan a ser intocables y potencialmente albergan una consideración proto-moral[1] y abandonan poco a poco la consideración de propiedad que tenían con el ser humano.
Entonces, respondiendo la pregunta, ¿Y si las plantas sienten? Mantendrían una consideración moral similar a la que tienen los carnívoros hoy a los chanchos, pollos y vacas. Es decir, se crea una moralidad que no es perfecta ni basada en principios, sino a reglas definidas en beneficio del ser humano, con las mismas inconsistencias que antes pero al menos reduciendo la crueldad hacia los animales. Las plantas seguirían sufriendo (si es que sufren), pero desde la óptica actual no es tan crucial al igual que el sufrimiento animal. Primero, por la cercanía de los animales domésticos que crean una unión intra especies y permite extrapolar ese sentimiento a otros animales creando un nuevo tipo de empatía. Segundo, el sufrimiento de los animales es más antropomorfo, sus emociones de sufrimiento son al menos reconocibles entre los humanos. Sobre todo en tiempos modernos donde hay una mayor consciencia acerca del sentir de los animales que proviene del punto anterior. Tercero y relacionado con lo anterior, la diferencia en inteligencia entre plantas y animales facilita que estas relaciones den frutos, existe un lenguaje y una retroalimentación que permite mantener códigos de conductas y permite entender al otro.
Finalmente podemos concluir que el argumento en su reduccionismo deja de lado aspectos de autorreflexión que impactan directamente en el desarrollo mismo. Pensar que la moralidad son reglas universales tajantes es un gran error para ambos lados del espectro.
El vegetarianismo y veganismo va más ligado a reducir el sufrimiento pero también a reducir el uso de recursos y mejorar la salud de las personas (en teoría). Además todo ser vivo necesita consumir recursos, por lo cual es necesario establecer el límite hasta donde el sufrimiento es posible. Dicho de otra manera, los que mantienen estas dietas abogan por una vida sana sin la necesidad de que exista un sufrimiento que humanamente podemos entender.
[1] Proto-moral ya que poco a poco y quizás en un futuro cercano alcancen una independencia completa sobre el ser humano y sean seres en sí mismos.
El sentimiento moderno es difícil de capturar pero mantiene ciertas vivencias compartidas que son accesibles de manera casi universal, tales como un viaje en el tren subterráneo. Siendo uno de los vehículos de transporte públicos más eficiente, no cabe duda porque la gente lo prefiere, pero igual que la modernidad, donde la vivencia es dejada de lado a favor de la eficiencia, nadie disfruta un viaje en metro por sus entornos o por lo intrínsecamente enriquecedor del viaje, sino más bien por lo rápido que podemos llegar del punto A al B.
Desde una manera más teórica el progreso puede ser visto como un afán vacío de una búsqueda de ganancia, que lleva o ha llevado hasta ahora una destrucción patente del planeta y del medio ambiente como lo conocemos.
El problema de la modernidad y por lo tanto del progreso económico y tecnológico, ha sido la falta de explicación filosófica acerca de estos avances y el impacto que tienen en la vida cotidiana. Bajo este argumento, no es suficiente simplificar el progreso solamente con cifras de mejoras, como vendría siendo la recopilación de cifras en el ensayo de Steven Pinker, el cual compila un abanico de métricas y las compara argumentando que actualmente vivimos en la mejor época posible. El problema de la argumentación a favor del progreso solamente utilizando cifras, es que esconden el sentimiento de frustración, desesperación y falta de humanidad. Las cifras que se utilizan van a ser de un carácter solamente económico y tecnológico, pero van a carecer de comparación política, sociológica o incluso psicológica. Por ejemplo, somos más eficientes en producir smartphones con mejores prestaciones, pero no somos capaces de incrementar la participación política y la adherencia a las instituciones entre algunas métricas preocupantes. Ahora, esto también trae contra-argumentos que son igual de ciegos, en el cual el progreso es visto de manera negativa, con cierta suspicacia y escepticismo. Ahí lo que se crítica es la lógica económica en su totalidad, pero tampoco se ofrecen alternativas reales al modelo económico que rige actualmente.
La gran pregunta que generan estas reflexiones es: ¿Cómo ayudar a que ese progreso este en más sintonía con los seres humanos y el planeta? La respuesta puede recaer en un argumento ligeramente ambiguo, que es: generar lineamientos seculares y universales que ayudasen a permear una idea de progreso holístico sin crear una sensación de cansancio, frustración y decepción. Holístico en el sentido en que tomara más variables que la ganancia económica y expandiera el concepto a una multi dimensionalidad compartida. Al igual que la evolución de la moralidad, esta no imposición de arriba hacia abajo, más bien tiene una adopción natural dado que las sociedades van cambiando lentamente sus miradas a través de su opinion pública, al igual que una decantación. Algunos podrían argumentar que las empresas B mantienen este afán de búsqueda multi dimensional, pero la verdad que es necesaria una visión aún más amplia sobre sobre que éticas sería ideal discutir y potencialmente compartir.
Algunos intelectuales, tales como Peter Sloterdijk argumentan que es necesaria una segunda Ilustración, en los cuales estos conceptos puedan ser introducidos, o seguir el sueño de Kant con su giro copernicano, de hacer la filosofía el marco metafisico.
Estos últimos 3 a 4 meses han sido tiempos abruptos para las redes sociales, que son cada día más poderosas, como se describió en una columna anterior. La elección estadounidense resultó ser un desafío a escalas mayores, sobre todo luego de la insurrección del 6 de Enero junto con borrar la cuenta de aquel entonces Presidente Trump.
Contexto
El borrar la cuenta del Presidente de Estados Unidos marca un precedente en la cultura estadounidense, en donde se viene incubando hace un largo tiempo lo que llaman en inglés, the cancel culture, o la cultura de la cancelación, que se define como una expulsión o momentáneo bloqueo a un usuario o institución que se escapa de una determinada forma de pensar o hacer en relación a un grupo dominante. Al incluir a la persona más poderosa del mundo dentro de esta misma cultura, llega a preguntarnos ¿qué tan poderosas son estas redes sociales? pero más importante aún, ¿En dónde termina lo privado y comienza lo público en las redes sociales?
Límites: Privado y Público
Preguntarse esto no es trivial dado que las redes sociales en Estados Unidos se acogen a la Sección 230 de la acta de decencia comunicacional de la ley federal, la cual les permite no hacerse responsable de los contenidos que emiten. En base a este ley, el argumento que las redes sociales esgrimen es contradictorio, dado la forma arbitraria en la cual deciden que contenido eliminan y que contenido se queda, igual que un medio de comunicación.
El límite se transgrede cuando existen censuras arbitrarias y cancelación de cuentas como se describió anteriormente, las cuales provocan límites a la libertad de expresión. El problema es que estas redes sociales funcionan como grandes oligopolios, que regulan contenidos de manera similar entre ellas. Por lo tanto ser borrado de todas ellas, significa que parcial o totalmente pierdo el acceso a mi audiencia de lo que pienso y opino.
Si la libertad es solo garantizada cuando sabemos de antemano que sus efectos serán beneficioso no es libertad
No es casual que estas compañías estén basadas en Estados Unidos, en donde la regulación de mercados ha sido bastante laxa en las últimas décadas, en un país que dice ser el campeón del capitalismo permitió a empresas como Google o Facebook aniquilar la competencia comprando cada startup que pudiera ser un problema para el continuo crecimiento y participación de mercado que estas empresas poseen. Ejemplos tales como Instagram, YouTube, WhatsApp entre otros, tuvieron que haber sido reconsiderados dado la concentración de poder que esto significa.
Regulación
La caída del medio impreso
El origen híbrido – privado y público- de las redes sociales genera una concentración de poder con un tamaño imaginable décadas atrás. Por ejemplo, no es claro el efecto que tienen sobre la democracia, tanto en el uso que le dan sus ciudadanos, como también por la reducción sustantiva de ingresos para el periodismo en general.
Fuente: Zenith
La constante caída de los ingresos de los medios impresos se produce por la irrupción de las redes sociales con sus modelos personalizados de anuncios junto con una caída en tráfico. Las redes sociales al mantener un mar de información de cada usuario, es capaz de mostrar anuncios relevantes, que los anunciantes agradecen, por el aumento en rendimiento que esto confiere. En contraste, los periódicos que muestran un anuncio de manera generalizada y por supuesto con un menor rendimiento para las empresas anunciantes.
Esto produce un escenario en donde según Marc Edge los diarios impresos en Reino Unido han sido resilientes, buscando diversos modelos para seguir siendo competitivos, el más popular, el aumentar la base de suscriptores, tanto como un pago obligatorio o voluntario. The Times, un diario conservador, ha hecho exactamente eso, implementado una barrera para acceder al contenido que solo usuarios suscritos a la plataforma pueden ver, eliminando cualquier contenido gratuito. En el modelo de pagos voluntarios el diario pionero es The Guardian que ha logrado un gran éxito en base a este modelo.
Por lo tanto, si incluso los periódicos han podido seguir siendo rentables, la importancia que tenían ha venido reduciéndose sustancialmente, desde el 2002, en donde llegaron a su máximo de ingreso. Algunos analistas dicen que han llegado a niveles de venta de la década de los 50. El modelo de suscripción es positivo para los medios pero no tanto para sus usuarios, en donde el que no tiene suficiente dinero para tener múltiples suscripciones, esta condicionado a consumir un solo sitio o de frentón consumir sitios gratuitos que no siempre poseerán la misma calidad. De manera anecdótica The Sun , un diario de chismes, trato de imitar la estrategia del periódico The Times sin grandes resultados, por lo que se intuye que solo el contenido de calidad podría incluir una barrera de acceso.
Vació regulatorio
El no tener un marco de regulación por tanto años ha generado un vacío legal, en donde el flujo de información ha cambiado completamente. La propagación de noticias e información de una sola vía, es decir de medios de comunicación a una audiencia, ha cambiado para generar una conversación más abierta, en donde esta conversación ahora es de dos vías, por ejemplo puedo reaccionar directamente a una noticia, pero aún más interesante puedo reaccionar a las fuentes de esa noticia, mientras está sucediendo. De alguna forma anteponiéndose a la noticia misma, más de alguna vez se ha visto que sitios de noticias citan tweets directamente, como un hecho factual e histórico.
Al mirar a los medios de comunicación tradicionales vemos que tienen marcos regulatorios definidos en base a los cuales son responsables de lo que publican. Por ejemplo, la regulación en Inglaterra para la difusión de televisión y radio, codificada en la acta de radiodifusión del 1990, contienen claros lineamientos de los límites de estos medios. Estas reglas son usadas en casos extremos, hace un par de semanas el regulador a cargo, Ofcom, anuló la licencia a China Global TV por cubrir las protestas de Hong Kong de forma imparcial y la transmisión de una confesión forzada de un investigador inglés en suelo chino. El regulador actúa también con multas monetarias, las cuales según The Guardian no han excedido los 2 millones de libras.
¿Qué significa esto? Bueno que la regulación permite establecer un marco en los cuales estos medios operan, siendo imposible la propagación de información falsa, dado que el canal o radio que lo haga se vería enfrentado a una severa multa. Ahora, alguien podría preguntar ¿esto no limita la libertad de expresión? personalmente no lo creo, dado que se podría argumentar lo mismo para difamar a cierto grupo o propagar mensajes de violencia explícita.
Otro caso interesante es la regulación de medios impresos en Reino Unido, que es absolutamente privada. Es decir, los medios impresos se acogen a las mismas leyes que cualquier ciudadano a pie, pero mantienen una regulación privada en común, que deben seguir, también con el incentivo de evitar cualquier regulación pública. Sobre este punto es donde las redes sociales deberían encauzar su esfuerzos, es decir mantener un órgano externo que pudiera decidir los casos de moderación más complicados. Facebook ha tratado de acercarse a este punto con su Oversight Board, asignando académicos, políticos, periodistas entre otros, para que puedan decidir acerca del contenido más delicado. Pero esto no ha estado fuera de controversia, dado que han habido ciertas diferencias entre Facebook y la junta. El caso más emblemático es la expulsión de Trump de la plataforma, en donde la junta decidió que Trump debería ser suspendido por 6 meses en vez de ser eliminado completamente. Una decisión que esta fuera de los términos y condiciones de Facebook. Este comunicado fue dado a conocer el 5 de mayo en el sitio web de la junta.
El caso Australiano
Facebook luego de una larga lucha con el gobierno australiano ha llegado a un acuerdo en donde negoció en privado con las grandes cadenas de noticias para establecer un plan de pagos. News Corp una de las compañías beneficiadas por este acuerdo, parte del grupo Murdoch.
La negociación partió cuando el gobierno australiano impuso que las redes sociales, en especial Google y Facebook deberían pagar una tarifa cada vez que redireccionaran contenido a los sitios de noticias. Esto ocasiono que estos sitios en vez de pagar, bloquearan el tráfico que eventualmente iría a esos sitios. Finalmente conversaciones entre el gobierno australiano y Facebook llegaron al acuerdo antes anunciado.
Esto demuestra dos cosas, uno que las redes sociales son cada vez más grandes y son capaces de modificar la política publica que directamente los afecta. Las negociaciones fueran llevadas a cabo por el mismismo Zuckerberg y el equivalente al ministro de hacienda australiano Josh Frydenberg – treasury minister. Segundo, que dado el compromiso monetario sea suficiente, los reguladores están felices con tal de mantener al gremio de los periodistas contentos. Tal como reporta TechCrunch, Facebook se compromete a pagar 1 billón de dólares en los próximos 3 años, al igual que Google.
Conclusión
La operación de las redes sociales se parece cada vez más a la acción de un estado, que a la de una empresa privada. El Oversight Board algunos analistas lo consideran la corta suprema de Facebook, dado que de forma análoga a una democracia, es independiente a los otros poderes. Pero también vemos con cierta frecuencia y en especial Facebook están altamente interesados en ingresar a mercados emergentes, dado la alta penetración de mercado en países desarrollados. Basta ver el proyecto fallido de India, en el cual prometían acceso a internet de forma gratuita pero con ciertas condiciones. El acceso no era completamente libre, sino restringido a un par de sitios web que Facebook estimó convenientes, infringiendo el valor mismo del internet, que es el acceso libre y sin fronteras que posee el internet. Esto demuestra una vez más la falta de ética y criterio de los altos ejecutivos de Facebook, que parecieren estar más preocupados del próximo trimestre de ganancias y sumar más usuarios que la tensión que genera el uso y comercialización de datos ajenos.
Por lo tanto las redes sociales deberían ser completamente abiertas de como moderan su contenido y esta moderación deberá ser externalizada a grupos de interés público y privados. Claramente el regular el discurso online necesitará cierta innovación dado que el discurso online es algo completamente nuevo, sin precedentes, dado a la escala y heterogeneidad del contenido. No solo una innovación tecnológica, sino también una innovación de corte psico-social en donde es necesario estudiar sociológicamente estos asuntos.
En las últimas semanas, Bielorrusia ha estado en el foco de atención con protestas masivas en contra del denominado “último dictador de Europa”, Lukashenko.
Según el reportaje de Wired el movimiento bielorruso es análogo a la primera árabe, en donde las redes sociales son una parte fundamental para la congregación y organización de las protestas, pero la plataforma propulsora no es Facebook o Twitter sino más bien Telegram, que funciona como un aplicación de mensajería pero también como propagación de noticias.
Las redes sociales pareciere tener efectos positivos cuando los regímenes totalitarios desean coartar la libertad de sus ciudadanos, y quedan como los únicos métodos de propagación de noticias, organización y congregación. Pero pareciere que las redes sociales en democracias liberales, en donde existe una diversidad de medios de comunicación, son más dañinas que liberadoras.
Inicios
Con el ideal de querer conectar personas, las redes sociales ampliaron sus modestas bases de usuarios a principios del 2000, a pasar a ser verdaderos gigantes y representar una proporción importante de los usuarios con conexión a internet.
El problema es que las redes sociales han cambiado su objetivo de conectar personas, a pasar a ser grandes redes de contenido, en donde son la principal fuente de información, algunas encuestas enfocadas en Estados Unidos y Reino Unido estiman que un poco más de la mitad de los usuarios consume noticias desde las redes sociales.
¿Por qué esto suele ser visto como un problema? Esencialmente las redes sociales estan funcionando como un periódico, el cual contiene “líneas editoriales”. Facebook o Twitter pueden negar la propagación de ciertas noticias, dado que no cumplen con los términos y condiciones del sitio, las cuales son decididas bajo el criterio de sus ejecutivos, en vez de una mediación y acuerdo público. De hecho, usuarios de la derecha más extrema en Estados Unidos han llegado al extremo de crear su propia red social llamada Parler al sentirse excluidos de Facebook o Twiter.
Tampoco es nada nuevo que la tendencia política de Sillicon Valley es más cercana a los demócratas que a los republicanos tal como lo indica un estudio de Stanford. Por lo tanto, ¿Cómo se genera un balance entre opiniones sin generar ostracismos en los silos de información?
Polarización
Uno de los principales objetivos de las redes sociales es maximizar el tiempo que cada usuario permanece en el sitio, aumentando así los anuncios visualizados y respectivos clicks con lo que finalmente aumentan sus ventas y ganancias.
Para captar esa valorada atención los algoritmos de cada red social ofrecen recomendaciones similares a preferencias que hemos indicado previamente, por ejemplo a quienes hemos seguido o los post que nos han gustado, por lo cual el algoritmo se preocupa de proveer una curatoría de contenido similar al anterior, haciendo muy difícil la tarea de mostrar contenido novedoso o opuesto a la cosmovisión del usuario.
En términos prácticos esto se ha visto plasmado en la política estadounidense, en donde el votante medio se ha tendido a extremar sus visiones más cerca del extremismo, que al centro, tal como lo indica Pew Research.
Tal como lo describe de manera temprana Cass R. Sunstein en su libro Republic.com 2.0 en el 2007, las redes sociales generan silos entre los sujetos que las utilizan, perpetuando las cosmovisiones de cada grupo, desarrollando fragmentación y polarización política.
Es extremadamente desafortunado cuando las nuevas tecnologías son usadas para incrementar la probabilidad de que los miembros de diversos grupos eviten visiones contrarias.
republic.com 2.0 Cass r. sunstein (p.215)
Además, diluye el espacio público en donde los filtros y personalizaciones son la norma en lo que podríamos llamar el espacio público online. El espacio público tal como lo indica el autor permite el desarrollo de momentos inesperados.
Los encuentros sin anticipación son centrales para la democracia misma. Tales encuentros involucran tópicos y puntos de vista que las personas no han buscado o que pueden encontrar bastante irritantes. Son importantes para evadir la fragmentación y el extremismo.
republic 2.0 Cass r. sunstein (p.5)
Centralización
Las redes sociales por lo tanto crearon nuevos espacios pseudo públicos de interacción y opinión inexistente anteriormente, al menos en la escala de las redes sociales que tienen un alcance superior a los 2 mil millones de personas. De hecho cambian la morfología del intercambio, en el sentido de que es primera vez que un solo “ente” privado monopoliza este espacio público, en contra posición a las capas de opinión pública tradicionales.
La centralización concentra una multiplicidad de desafíos que suelen ser minimizados y las supuestas soluciones provienen de las mismos sujetos que las fundaron, como si ellos mismos fueran los salvadores. Uno de los desafíos más significativos es la polarización que es un subproducto de la falta de empatía y odio que estas redes generan. Pero el error es fundacional dado que existe una falta de ética y moralidad, la filosofía de “conectar personas” es anticuada y pareciere ser completamente lo contrario.
Otro desafío que es interesante es la moderación de contenido. Dado que el contenido es producido a tal volumen que es imposible de procesar de manera manual, estas compañías se han visto obligadas a generar algoritmos con inteligencia artificial para poder detectar cuando alguien ha abusado sus términos y condiciones. Tal como lo indica la agencia que regula las comunicaciones en Reino Unido, Ofcom, la moderación de contenido en base a inteligencia artificial posee limitaciones en torno a la clasificación de contenido de odio con respecto al contexto o también a contenido basado en imágenes, especialmente como memes.
Además, las redes sociales no han estado libre de controversias, respecto a la censura sobre todo cercano al proceso de elecciones que culmina en Noviembre para la elección del próximo presidente de Estados Unidos. Twitter censuró un artículo del New York Post, dado que contenía fuentes de información basadas en un hackeo a una cuentas del correo electrónico del hijo de Joe Biden, Hunter Biden. Dada la presión de sectores republicanos, la censura fue levantada por parte de Twitter, lo que demuestra lo arbitrario de la censura.
Es decir, la solución que las redes sociales tratan de otorgar con la censura de discursos de odios terminan coartando la opinión pública y la libertad de expresión, más allá de la posición política.
Finalmente, cabe destacar que la centralización también es concentrada en una pequeña proporción de generadores de contenido, descrito en investigaciones de Pew Research, 80% del contenido es generado por el 10% de los usuarios. Es decir, si todos podemos comentar y crear tweets en este caso, solo un minoría es escuchada.
Por lo tanto, si es que existe una recompensa a la polarización dada su mayor popularidad, esto perpetua visiones más extremas pero con un completo vacío de racionalidad y sentido común.
Libertad de expresión
La corriente liberal clásica ha venido perpetuando el principio de libertad de expresión con cierta resistencia recientemente. La corriente desde John Stuart Mill, que argumentaba que existe cierta ganancia a escuchar la opinión contraria, incluso si esta en lo incorrecto. Tal como lo indica en su ensayo “On Liberty”.
Es el compromiso de decidir la pregunta por los demás, sin permitirles escuchar que puede ser dicho por el “sector” contrario lo cual denuncio y desapruebo.
ON LIBERTY JOHN STUART MILL (P. 28)
Mill al inicio de este ensayo está principalmente preocupado de la falibilidad de los enunciados que uno pueda albergar. En otras palabras, ¿cómo puedo estar seguro de lo que creo como verdadero es completamente cierto? Mill mantiene un concepto proto-popperiano, en el sentido que añade un grado de incertidumbre a lo creemos como cierto, dando espacio a las opiniones contrarias para elaborar sus argumentos.
Ahora, ¿Qué tiene que ver esto con las redes sociales? Bueno, si las redes sociales son el medio moderno de discusión pública con todos los pormenores comentados anteriormente, es imperativo que la libertad de expresión sea respetada, tal como la gran mayoría de sociedades liberales lo albergan en sus declaraciones de principios. Pero dado que como hemos comentado antes, las redes sociales se rigen por términos y condiciones decididas por fuera de la esfera pública, ¿Cómo pretendemos al largo plazo mantener este derecho?
Es el caso del transgénero, siendo un tópico especialmente acalorado en los Estados Unidos, donde ha sufrido una censura especialmente delicada a sectores no solamente de extrema derecha en donde se podría minimizar el fenómeno, sino también a académicos que están en contra del supuesto consenso público, como la doctora en psicología Debra Soh entre otros, ha existido una censura permanente supuestamente en pos de defender a las minorías transgénero, dado que las publicaciones de los académicos han sido clasificadas de transfóbicos. Lo carente de lógica en este concepto es ¿Quién define que es transfóbico? pero quizás más importante aún porque tiene que ser digno de censura? Tal como indica el razonamiento de Mill, no debería ser la propia opinión pública la que juzgue?
Conclusión
Al igual que el documental llamado The Social Dillema lanzado en Netflix concluye que es prácticamente imposible que las compañías más grandes del mundo cambien su comportamiento en torno a su principal fuente de ingreso, el cambio solo podría ocasionarse desde la regulación desde la esfera pública, a lo cual yo estoy de acuerdo. Pero además dejan de lado o no hay suficiente enfásis en reforzar la idea de que si esto no es hecho a tiempo, podríamos ver morir al periodismo tal como lo conocemos junto con avances cada vez más profundos a gobiernos autoritarios y populistas. No es coincidencia que las redes sociales provean de ficciones paralelas a las conocidas para que las narrativas de cada grupo político sean vistas como narrativas más congruentes, el rechazo al calentamiento global, una de ellas.
Finalmente creo que estas tendencias también fomentan el relativismo o la verdad propia, lo que hace el discurso público aún más difícil en conjunto a los desafíos de la polarización, centralización, censura y edición de contenidos antes comentado.
El debate público ha estado enfocado en definir qué tan legítimo es validar la meritocracia sin ignorar la condición social de dónde proviene. La motivación del debate proviene desde el mismo gobierno que ha impulsado medidas educacionales que consagran la selección como un pilar fundamental en establecimientos de alto rendimiento de carácter público.
Investigaciones han tratado de plasmar este concepto a través la variación de la siguiente pregunta, ¿Cómo es posible qué estudiantes de colegios particulares pagados obtengan el 80% de las gerencias? ¿Será la perpetuación a una clase aristocrática o es más bien meritocracia en su puro sentido?
En un mismo tono, el periodista Daniel Matamala en la columna Pedro, Juan y Diego trata de plasmar esta misma problemáticadescribiendo un cruce de datos entre pruebas SIMCE 2004, PSU 2009 y sueldos 2017 de 75,000 jóvenes. La medición compara solamente dos variables, el puntaje SIMCE en octavo básico versus el sueldo promedio, infiriendo que la primera métrica es predictora de la segunda. Daniel comete el error en pensar que el estudio puede ser usado para plasmar las desigualdades que se viven el sistema escolar, incluso sí estos son datos duros. ¿Por qué no? La conclusión carece de fundamentos dejando de lado una serie de factores que hacen el estudio poco interesante, dado que está compara elementos que entregan inferencias incompletas. La comparación entre jóvenes tiene que ser equivalente, para poder concluir que existe una discriminación de jóvenes de menores recursos a trabajos de mayores remuneraciones y mejores jerarquías. Por ejemplo, si estamos comparando jóvenes que cursaron carreras universitarias versus jóvenes que no lo hicieron claramente existirá una diferencia importante de ingresos y cargos. Además, habrá otros factores que también tienen que ser tomados en cuenta para evaluar la relación entre ellos y el nivel de ingreso. Estos factores podrían ser el nivel de inglés, la capacidad comunicacional, nivel de matemáticas, personalidad, capacidad de negociación entre otros. Entonces el contraste tiene que ser en base a elementos comparables, siendo la situación económica una de ellas, pero sin dejar de reconocer que las diversas habilidades – heredadas o no – generan diferencias en el ingreso.
En términos más globales, si deseamos analizar la
diferenciación a niveles poblaciones el indicador de la movilidad
intergeneracional de ingresos es una buena herramienta para entender más en profundidad
que está pasando.
¿Qué es la movilidad intergeneracional? Es un indicador económico que demuestra
el avance o estancamiento desde una generación a otra, en niveles económicos.
El indicador entrega un número entre 0 a 1 que significa el porcentaje de la
diferencia del ingreso actual respecto al promedio. Por ejemplo, el ingreso
promedio de Chile en 2017 fue de 554.493
pesos. Si una familia percibe 400.000, la diferencia es de 154.493 pesos, bajo
una elasticidad actual de Chile de 0.5, el movimiento intergeneracional
solamente le estaría heredando en promedio una diferencia bajo el promedio
salarial de 77.247 pesos – sueldo en promedio 477.246.
Según un estudio de la OCDE
la elasticidad en Chile del ingreso intergeneracional es de 0.5 o 50%. Javier
Núñez reconoce que ha habido una mejora en este indicador, pero argumenta que
se encuentra en intervalos altos – entre más alto el indicador, menor es la
movilidad. Otros intelectuales tales como Claudio
Sapelli argumentan que las diferencias salariales van a ser reducidas en un
corto plazo, dado que la diferenciación educacional es cada vez menor entre
generaciones más jóvenes.
Elasticidad de la movilidad intergeneracional – Fuente: ocde.org
Tal como se indica en el gráfico Chile podría tener
mejores indicadores, estando lejos de los países nórdicos, pero aún así
comparable a países como Francia o Austria.
En conclusión, es imposible debatir de que no existe
la meritocracia, pero está no se desarrolla en su más puro sentido, es decir
las familias son capaces de mejorar sus condiciones sociales a través del paso
del tiempo, pero las posiciones de mayor jerarquía corporativa siguen siendo en
su mayoría las mismas elites plutocráticas del puñado de colegios privados que
la revista Capital indica. Bajo mi opinión personal, creo que a medida que
Chile vaya diversificando su matriz económica bajo aumentos productivas, la
diversificación también se replicará en posiciones jerárquicas por necesidad.
Al día de hoy, muchas industrias poseen una base rentista las cuales ignoran su
carácter elitista.
Como si la copia de un software se tratara, el proceso experiencial es un continuo proceso de despliegue de identidad con una consistencia increíble – es muy raro realizar acciones fuera de la propia identidad.
La metáfora de la copia es para ilustrar el proceso rutinario de nuestras vidas y la falta de entropía en nuestro actuar, mas neguentrópico que entropico.
Pareciere que nos estamos copiando en cada momento, para combatir a esta entropía, que de cierta manera sabemos lo que funciona, pero no nos atrevemos a lo desconocido, porque puede caer en manos del caos.
La asimilación de uno como individuo hace que la copia haga sentido.
Al igual que la evolución darwiniana de los genes, la copia va mutando poco a poco transformando a la identidad. Pero ¿qué tiene que pasar exactamente para que la copia mute?
La claridad de perspectiva es un hito que nos permite hacer ese micro-cambio pero ¿cómo se construye claridad? Los procesos cognitivos de construcción mantienen una estrecha relación con los procesos auto reflexivos tanto desde el ámbito personal como terapia. La reflexión es el ejercicio de hacer buenas preguntas, tanto a otros pero también a uno mismo. El sinfín de preguntas que se pudieran dilucidar es enorme, la gran cuestión es más bien, ¿qué tan frecuente es ese proceso?
Al igual que una meseta, en donde la superficie es plana y tiene cierta altitud respecto a la superficie basal, de igual manera veo a los procesos anteriormente descritos. Seguramente la construcción de la meseta tardó millones de años a través de movimiento tectónicos de placas, que fueron capaces de generar el “desde”. El día de mañana la tierra puede destruir esa meseta o construir sobre ella.
La claridad nos vislumbra la autoconciencia y el autoconocimiento que nos hacen más resilientes a nuestro entorno y realidad como tal. Al minuto el cual apago las fantasías que tengo sobre mi y la realidad en general puedo explayarme con mayor eficacia y satisfacción personal en el entorno y con menos roce.
Pareciera que el avance tecnológico no nos ha dado problema hasta ahora y hemos disfrutado de este avance exponencial, pero cuando comienza a reemplazar el trabajo se ve con mayor temor que con apreciación. No es para menos, si casi a diario surgen titulares que quedarás sin trabajo, dado el surgimiento de los robots o la inteligencia artificial.
La robotización desde 2010 ha aumentado un 16% (CAGR) hasta el 2015 como muestra el gráfico doblando el número de unidades en ese mismo periodo tal como indica la organización la Federación Robotica Internacional en su reporte anual de 2016.
Los 5 países que lideran la demanda por robots son USA, Corea del Sur, Alemania, China y Japón concentrandoel 75% de las ventas/compras.
En pocos años, – en el plazo de nuestras vidas quiero decir -, podríamos llevar a cabo todas las operaciones de la agricultura, la minería y la fabricación con la cuarta parte del esfuerzo humano al que hemos estado acostumbrados.
De momento, la misma rapidez de estos cambios nos está perjudicando y generando problemas difíciles de resolver. Aquellos países que están sufriendo menos son los que no están a la vanguardia del progreso. Padecemos una nueva enfermedad cuyo nombre quizás aún no sea conocido por algunos lectores, pero de la que oirán mucho en los años venideros – esto es, el desempleo tecnológico. Lo que significa un desempleo debido a nuestro descubrimiento de medios para economizar el uso del trabajo que supera el ritmo al que podemos encontrar nuevos usos para el trabajo.
Pero esto es sólo una fase temporal de inadaptación. Todo esto significa a la larga que la humanidad está resolviendo su problema económico. Podría predecir que el nivel de vida en los países avanzados dentro de cien años será entre cuatro y ocho veces más alto de lo que es hoy. No habría nada sorprendente en esto incluso a la luz del conocimiento actual. No sería desatinado contemplar incluso la posibilidad de un progreso mucho mayor.
El desempleo tecnológico que describía se causaba por la introducción de nuevas tecnologías creando un desempleo temporal por el shock generado, pero a medida que la economía se recuperaba, esos puestos de trabajos se iban ocupando nuevamente porque la gente descupada se iba adaptando a la nueva oferta laboral, educandose para obtener nuevas habilidades.
Otro punto interesante que hace sentido para sociedades desarolladas con tasas de natalidad en declive es que los crecimientos económicos son solo posibles a través de aumentos de productividad, tal como lo indica reportes de McKinsey. En ese caso la robotización y en cierta parte la inteligencia artificial juegan roles estratetigicos para estás economias desarolladas.
Según mi punto de vista aún creo que estamos en un periodo de negación y deberíamos cambiar la posición del debate a una rápida adaptación e inversión en capital humano que este en sintonía con economías del siglo 21. El uso inteligente de la tecnología nos llevara a riquezas nunca antes vistas, de seguro la combinación de inteligencia artificial más el uso de robots – principalmente en manufctura y servicios . El desafío es interesante porque trabaja sobre el camino pavimentado del internet, es decir la inter-conexión mundial que generó, con la cual ahora se puede trabajar para que esa inter-conexión sea inteligente y este a nuestro servicio.
Hace un par de años el concepto de ingreso básico universal ha estado rondando la opinión pública como una política pública brillante, dado su carácter de transmisión inmediata de riqueza a las clases pobres, en donde entrega completa libertad de cómo gastar los recursos transferidos. Algunos incluso validan el concepto desde casos excepcionales en la historia, como el de la autora norteamericana Harper Lee que recibió ayuda económica para dedicarse de lleno a escribir su libro “Cómo matar a un ruiseñor” un completo éxito de la década de los 60. Esto da como puntapié una liberación de las clases pobres, tal como lo describe el historiador Rutgen Bregman en su charla TED “UBI es el capital de riesgo para los pobres”.
Ahora el concepto pierde el sentido dado que trata de cumplir dos objetivos que no son necesariamente lo mismo, primero quiere ayudar a las familias más pobres con una transferencia directa de dinero desde el estado, de lo cual se infiere que la burocracia estatal es ineficiente para suplir las necesidades básicas de estas personas, por lo que es mejor entregar directamente el dinero, pero el ingreso no es focalizado en los pobres sino que es universal, reduciendo el monto hipotético a entregar, siendo el impacto final muy reducido (sobre presupuestos manejables). El segundo problema a solucionar es amortiguar la transición de trabajadores que serán desplazados por la automatización en fábricas y los automóviles autónomos.
Los dos problemas tratan dos problemáticas económicas complejas que no van a ser solucionadas con transferencias directas de dinero. Al igual que otras transferencias de dinero directas, como el bono marzo en Chile, los ingresos pasan a ser parte del caudillo electoral como un cohecho indirecto a los representantes que otorgaron ese beneficio, y aún peor pasa a ser un ingreso permanente en la concepción del individuo que lo recibe. Bajo un cálculo rápido a Chile le cuesta 107 millones de dólares la entrega del bono marzo a 1.600.000 familias, el equivalente a menos de un quinto del presupuesto del Conycit.
¿Cuál es el beneficio neto de una transferencia directa – dejando de lado ganar poder político? Desde una mirada pragmática la respuesta sería ninguna, los estudios sobre UBI en el mundo no han dado respuestas concluyentes dado que no han sido sustitutos a los sueldos de las personas sino más bien ayudas secundarias, como es el caso de la India en donde el pago mensual correspondía a 300 rupias, el pago mínimo diario de un trabajador. Por lo que claramente ayudaba, pero no sustituye la actividad económica del trabajador.
Desde la hipótesis que el UBI si fuera un reemplazo del sueldo mínimo, por ejemplo, sería algo imposible de pagar por parte del estado. Bajo el supuesto que el estado chileno pagara a los 8 millones de trabajadores ocupados un sueldo mínimo de 200 mil pesos, esto sería cercano a los 29 mil millones dólares al año, equivalente a la mitad del presupuesto de gobierno al año.
En conclusión, el UBI no tiene un objetivo claro hacia que problema intenta solucionar, no es práctico en torno a números que hagan sentido y que un estado sea capaz manejar siendo extremadamente caro y por último establece una permanencia en el tiempo difícil de eliminar para balancear déficit del presupuesto, en donde los políticos lo pensarían dos veces antes de quitar un programa de esta envergadura para no poder votos.
Ideales utópicos han siempre estado en el imaginario social. Es la naturaleza humana tratar llegar a esos niveles, pero esas ideas permiten a sus líderes generar atrocidad contra la sociedad que un principio querían ayudar, transformándose en grandes falacias. Los líderes de estas ideas parecen representar fielmente la cita de Maquiavelo.
El fin justifica los medios
Las ideas están constantemente en una batalla entre ellas, como un en ring de box, donde dependiendo en eventos recientes y la opinión en medios masivos, determina cuales son las ideas que ganan, pero si eso está pasando, es más dañino que sean ideas fijas que ideas dinámicas. Por ejemplo, analizando comportamiento cultural del inicio de los siglo XX, era aceptado que las mujeres no votaran, porque la idea que se concebía en esa época era que las mujeres inferiores a los hombres. Según el autor Richard D Atlkins, profesor de literatura, en su libro Personas Victorianas e Ideas (Victorians People and Ideas).
La primera cita es sobre (Altick 54) que describe la filosofía de la época:
“Una mujer es inferior al hombre en todos los aspectos, excepto la única que cuenta más para un hombre: su feminidad.
Su lugar era en la casa, en un verdadero pedestal si uno podía permitírselo, y empáticamente no en un mundo de amoríos.”
El autor entrega su comentario sobre la cita:
La sociedad patriarcal no permitía a las mujeres tener los mismos privilegios que los hombres, En consecuencia las mujeres eran asignadas a deberes más femeninos como cuidar la casa y perseguir los canales de la creatividad femenina.
¿Qué hubiera pasado si este ideal se hubiera mantenido sobre el tiempo?, Es obvio que la sociedad como la conocemos estaría mucho peor en varios niveles. Por ejemplo, la inclusión femenina en directorios de negocios en Noruega, bajo la ley que impone una cuota de 40% de mujeres sobre el directorio, el resultado ha generado la creación del orden de 50% más posiciones gerenciales según el gobierno noruego.¹.
Mi argumento es que la ideas cambian en largos periodos de tiempo, porque las sociedad vistas como sistemas, cambian su perspectiva. Alvin Toffler, en el libro El Futuro del Shock, habla de que la sociedad se resiste a grandes cambios, pero pequeños cambios sobre largos periodos de tiempo son puestos en práctica por la sociedad, por lo tanto los mismos cambios rechazados originalmente por la sociedad por ser tan radicales y repentinos, son aceptados bajo cambios más “digeribles”.
Después de haber creado un contexto acerca de cómo las ideas han ido evolucionando, me gustaría analizar dos ideas. Primero, ¿Cómo la libertad individual puede coexistir con el bienestar social?.
Una de las constantes variables de vivir en sociedad por más de 5.000 años, han sido los distintos niveles de libertad. Algunos pueden argumentar que no es perfecta, en lo que estoy de acuerdo, pero de cierta manera este pensamiento no es muy constructivo versus lo que hemos logrado. Además del que el proceso ha sido muy lento, en donde la balanza se ha ido nivelando poco a poco, a medida que han pasado los siglos pero partiendo de bases muy precarias en términos de derechos y libertades.
Desde un punto de vista comparativo la idea de un bienestar social podría ser opuesto a de un bienestar personal, pero en cierta manera nuestras acciones “egoístas” mantienen que el sistema siga funcionando, en términos matemáticos, las 8 horas que entregamos de Lunes a Viernes para trabajar de cierta manera se multiplican varias veces de lo que obtenemos de a cambio por vivir en una sociedad, haciendo la comparación en vivir en una completa autarquía, donde la cantidad de trabajo necesaria para obtener los mismos bienes o incluso menos es mucho más intensa.
¿Cómo podrían coexistir estas ideas?. Tengo la creencia personal – Siendo “infantil” en pensarla – que la gran mayoría de problemas que el mundo enfrenta el día de hoy no se resolverían con más dinero, sino más bien con una humanidad interconectada e interesada en resolver esos problemas que esta sufre. Los ejemplos más clásicos e inspiradores provienen de las historias de los grandes líderes del pasado, que movieron montañas, Gandhi, Mandela y King. ¿Qué pasaría si el día de hoy estableceremos un hoja de ruta para cumplir un objetivo tan grande como liberar a un país entero como lo hizo Gandhi?, claramente estableceríamos al dinero como un factor para financiar la guerra cierto?, un proyecto colosal cierto?. Creo que somos responsables de cargarnos del mismo nivel de inspiración pero a la vez siendo prácticos.
Otro punto que es extremadamente importante según mi opinión es que el marco de referencia en donde se ejerza la coacción masiva debe ser completamente libre, es decir , cualquier sistema que quiera quitar libertades, pero en pos de lograr grandes proyectos o avances, es un esquema avanzado de estafa que hay que evitar a toda costa. La medicina perfecta recae en dar al ciudadano una libertad bajo marcos morales y legales, en donde ellos decidan qué hacer. Lo interesante, sobre todo cuando se habla de que modelo económico/político es que al final del día, lo que está en juego son los valores que pueden ser formales pero también informales. Mi tesis es que estos valores evolucionen en periodos de tiempo prolongado, en donde se incluyan valores humanitarios como base, que de cierta manera ya están flotando en nuestra sociedad, es decir existen aspiraciones valóricas que no se realizan, como por ejemplo ayudar al prójimo/comunidad. Ahora, si la base valórica incluye valores humanitarios, donde sea importante ayudar a la comunidad/prójimo/humanidad, obviamente como sociedad vamos a estar mucho mejor, el hecho de que hayamos evolucionado nómades pero en pequeños grupos, hace que velemos por nuestra subsistencia, pero también la subsistencia de otros, por lo que existen incentivos hormonales en el cerebro como la serotonina y oxitocina que se disparan cuando haces un gesto generoso o ayudamos a alguien. ¿Qué pasaría en vez de tener clases de religión, nos enseñaran el verdadero valor de dar?, Por ejemplo las sociedad colectivas como la japonesa y en cierto grado la inglesa tienen culturas en pos de bienestar e interacción social bajo el respeto, en donde “es aprendido” y luego valorado, por consecuencia replicado por nuevas generaciones. Por lo que la cooperación podría ser algo que se aprende, por entender el valor de ayudar, pero también en participar en algo más grande que uno, un tema de suma importancia en el día de hoy en los puestos de trabajo, sobre todo para las generaciones jóvenes.
El desafío está en mover a 7 billones de personas bajo este desafío que al final del día es mejorar una base valórica, pero como repasamos en párrafos anteriores los cambios son extremadamente marginales. Para apuntar hacia la población masiva habría que convertir en esos valores deseables, una tarea no menor, de cierta manera que el comportamiento sea replicable de una forma genuina.
En conclusión asumamos que todo el mundo logra los valores más alto que podemos esperar como sociedad, Habrían perdidas de la libertad individual?, por supuesto que sí, pero yo creo que seríamos capaces a tolerarlas, dado que el resultado de que todos actuemos bajo esos valores. Es decir que la acción conjunta es mayor al costo de oportunidad de no hacer una acción 100% egoísta. Claramente esto reduciría la libertad como la conocemos, pero se escaparía del argumento, porque esas acciones estarían actuando bajos morales o ninguna moral, la libertad debe ser bajo un marco de referencia moral y legal. El mas triste ejemplo de libertad que se me puede ocurrir es el de George Soros que apostó por la devaluación de las monedas Tailandesa y Malaya, que junto con la entrada de otros inversionistas institucionales provocaron el default del banco central tailandes. Este tipo de acciones claramente escapan de lo mencionado anteriormente dado que lo que podrían ganar un grupo de inversionistas va en pos de malestar más global para todo un país. Finalmente creo que la cooperación y libertad pueden existir si somos coherentes con lo que creemos y nos suscribimos a ello, donde la humanidad quizas pueda tener un mejor futuro (no utópico).